Papel pintado metalizado, mucho más que una tendencia

El papel pintado metalizado es una de las mejores opciones que existen a la hora de vestir las paredes de tu casa y renovar la decoración. Te permiten disfrutar de una gran variedad de colores y texturas diferentes que encajarán perfectamente con el estilo de tu hogar. Sabemos que es una apuesta atrevida pero a la vez original y muy interesante que sin duda aportará un aire diferente a cualquier estancia de la  casa.

Si le gusta la declaración audaz, el papel pintado metalizado es una buena forma de conseguirlo. Los colores y las texturas metálicas añaden un aspecto emocionante a sus paredes, ofreciéndole una forma fácil de refrescar la decoración de su habitación. Veamos lo que explican los expertos como Saint Honoré sobre esta modalidad de papel pintado textura.

Qué aporta el papel pintado metalizado

Agregar un papel pintado metálico en casa dará un auténtico toque de modernidad, al tiempo que conferirá al espacio un aspecto y una sensación de lujo. Estos papeles pintados se pueden encontrar en tonos dorados, plateados o cobrizos, o en tonos más neutros que combinan a la perfección con cualquier color de acento.

Después de ser una de las tendencias más solicitadas en decoración, el papel pintado metálico está ahora disponible en un gran número de diseños y colores diferentes. Este papel pintado con acabado metalizado puede aplicarse a todo tipo de paredes: lisas o con textura, verticales u horizontales, lo que lo convierte en un producto versátil que se adapta fácilmente a diferentes estilos y looks.

El papel pintado con acabado metalizado da profundidad, riqueza y glamour a cualquier espacio que lo reciba. Es una excelente opción para decorar superficies en salones, dormitorios o incluso baños. Puede optar por cubrir toda la superficie de sus paredes o sólo una, creando un toque único.

Añade elegancia y sofisticación a tu  hogar con un maravilloso papel pintado metálico: la solución perfecta  para interiores modernos.

Soñadora e idealista pero con los pies en el suelo y con una visión muy clara de la realidad. Quizás sea toda una paradoja en sí misma que traduce en una insana curiosidad por todo lo que la rodea.