Qué tamaño debe tener la alfombra del salón

Tarde o temprano toca  decorar el salón,  bien sea porque es nuevo   o simplemente  porque nos  apetece cambiar de muebles  y objetos. En estos casos, los muebles más influyentes son  el sofá y  la  mesa del comedor, que  si los cambiamos, daremos un aire nuevo. 

Pero como tanto  el sofá  como la mesa son tan grandes y tienen tanta presencia, su cambio normalmente comporta modificar otras cosas, como por ejemplo, la alfombra.

Vamos a ver qué tamaño de alfombra conviene elegir  y cómo  colocarla para que  armonice con el sofá, dos pesos pesados en nuestro salón. 

Escogiendo el tamaño y tipo de alfombra correctos

El sofá es el mueble que ocupa más amplitud de zona en el salón, y requiere saber elegir los complementos que tiene alrededor. Uno de ellos es  la alfombra, y la  elección de  su tamaño  irá  en función del sofá  que tengamos. Pero mejor veámoslo en ejemplos prácticos: 

Alfombra para acompañar sofás de dos o tres plazas: hay que tener en cuenta que las alfombras siempre deben cubrir la totalidad del largo del sofá. Para que este quede  bien siendo de dos o  tres plazas, debe reposar sobre la alfombra o estar pegado a ella en toda su longitud.

En el caso de que el  salón sea muy amplio o  tenga  dos sofás enfrentados,  buscaremos también otra alfombra que cubra la  superficie libre entre los sofás frente a frente.

Acompañando sofás con chaise longue: el chaise longue vuelve a estar muy de moda, y debe ir siempre sobre la alfombra en su totalidad o parcialmente.

En sofás esquineros: hay quien los confunde  con el  chaise longue, pero conviene diferenciar. Porque también hay que considerar que pueden  haber alfombras redondas u ovaladas, lo que puede ser una opción  interesante  si buscamos una  decoración más extravagante o vintage.

Y tú, ¿todavía no  tienes claro la  alfombra o alfombras que necesitas  para decorar el salón? Hay otro  pequeño detalle, que no deja de ser importante. Si quieres una alfombra para disfrutar todo el año, eligela de fibras naturales como el  yute,  cáñamo, etc. Pero si la quieres solamente para los meses más fríos del  año, opta por una alfombra de lana o tejido grueso: conseguirás un extra de confort y calidez.

Soñadora e idealista pero con los pies en el suelo y con una visión muy clara de la realidad. Quizás sea toda una paradoja en sí misma que traduce en una insana curiosidad por todo lo que la rodea.